Tres de oro

Falta poco, pero no es bueno perder la concentración. El Equipo de los pibes va en busca del campionship y lo bueno es que está transitando por la vía correcta.
Poco, sí, pero falta.

En las próximas semanas será crucial la atención que el Míster le aporte al plantel, que a pesar de algunas bajas, sigue en carrera. Es por eso que desde arriba ve cómo el pelotón de seguidores le quiere comer los tobillos a este equipo que sacó una vez más un resultado positivo.

El último sábado, Vidrios Mercedes – Davobe se llevó tres puntos de oro, que como en los anteriores, a esta altura del certamen, cotizan el doble.

Atrás quedó AIB, y también en el pasado quedó la AJB Azul. Se ganó con lo justo, para qué te vamos a mentir, pero un equipo de estas características, si quiere salir campeón, deberá superar los obstáculos jugando bien, o como el orto. De lo que no se puede privar es de poner mucho huevo, como lo está haciendo desde la fecha número uno.

Tal vez ésta sea la característica más sobresaliente de un plantel numeroso que juega no sólo adentro de la cancha, sino también afuera.
Otra de las cualidades que sobresale en este campeonato no es menor: Los marcadores adversos se revierten. Ya son tres los encuentros en los cuales El equipo de los Pibes se va al descanso con un gol en contra y ninguno a favor, para después aparecer y llevarse puesto al que sea, sin importar ni sexo ni edad.

Es por eso que apareció Shuly Dicatarina, por atrás de todos, sin pedir permiso alguno, para dejar esa zurda magnífica planchada en el césped y disfrutar del encuentro con la pelota y verla, un segundo después, besar la red en un reconocimiento familiar que se había ido de vacaciones. Era el 1 a 1.

Es por eso que apareció Mariano Ramos, aún con el peso de haber desperdiciado un penal en el primer tiempo, para hacerse cargo de un tiro libre que justamente lo liberó de aquel trago ácido, transformándolo en un grito de desahogo que compartió con todo el plantel.

Es por eso que los once que empezaron, más los once que terminaron, más los que desde afuera no dejaron de hacer fuerza ni un minuto, lograron los tan ansiados tres puntos que los posicionan bien arriba.

Ahí va, el grupo que jamás bajó los brazos, en la cima del campeonato, superando estadísticas (se le ganó al equipo que nos aguó la fiesta en el torneo anterior) y abrazando cada jugada, como si fuera la última.

La Comisión